Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino

Santo del 27 de abril

Santo del 27 de abril | Celebrando a Vida dos Santos da Igreja

El día 27 de abril, la Iglesia Católica honra a un santo o beato cuya vida fue ejemplo de amor, entrega y fidelidad a Dios. A través de su testimonio, somos invitados a renovar nuestra fe y a buscar la santidad en lo cotidiano. El Santo del Día no es solo una figura histórica, sino un modelo vivo de cómo seguir a Cristo. Su memoria fortalece nuestra esperanza y nos recuerda que todos estamos llamados a la santidad.

 

Vida del santo y legado espiritual

 

La vida del santo que celebramos hoy refleja el poder transformador del Evangelio. Su camino de fe, marcado por sacrificios y virtudes heroicas, continúa inspirando a la Iglesia. Su legado espiritual nos anima a vivir con mayor entrega y caridad.

 

Milagros y testimonio de fe

 

Muchos santos fueron instrumentos de milagros, signos del amor de Dios. Pero más allá de lo extraordinario, su verdadero testimonio de fe fue su vida diaria de oración, servicio y fidelidad. Ellos son ejemplos concretos de cómo vivir el Evangelio en toda circunstancia.

 

Oración y reflexión cristiana

 

Celebrar al Santo del Día es también una oportunidad para la oración. Podemos pedir su intercesión por nuestras necesidades y crecer en la reflexión cristiana, dejando que su ejemplo nos guíe en nuestro camino hacia Dios.

 

Lista de santos del día 27 de abril

 

s. Simeón, obispo de Jerusalén y mártir

La noticia que tenemos de San Simeón es contada en primer lugar por Egesipo, uno de los primeros escritores cristianos, probablemente de origen palestino, que llegó a Roma a mediados del siglo II, y luego también por Eusebio de Cesarea, que en su Historia Eclesiástica lo llama "segundo obispo" de Jerusalén, sucesor de Santiago de Alfeo, conocido como el Menor, asesinado en el año 63.

Una identidad imposible de verificar históricamente

Los orígenes de San Simeón son muy poco claros. Según una tradición muy poco atendible, tuvo una vida muy larga, llegando a los 120 años de edad. Algunos lo señalan como uno de los discípulos -aquel cuyo nombre no se menciona en el Evangelio de Lucas- que se encontró con el Señor en el camino de Emaús sin reconocerlo inicialmente; según otras fuentes, sería hijo de uno de ellos, y precisamente de Cleofás. Según otros, habría sido pariente de Jesús mismo: Eusebio de Cesarea, por ejemplo, lo cita como "el primo del Salvador".

Episcopado y martirio

Ciertamente se sabe que estamos en la era de dificultades internas en el mundo judío que precede a la revuelta armada contra el dominio romano.
Simeón, después de la muerte de Santiago, fue nombrado por unanimidad como el nuevo líder de la comunidad cristiana de Jerusalén -la única compuesta íntegramente por judíos- que se vería obligada a emigrar tras la destrucción de la Ciudad Santa y del Templo y a refugiarse al otro lado del Jordán, en Petra de Perea. En 98, el español Ulpio Traiano se convirtió en emperador, y aunque consideraba que los cristianos eran un peligro para el Estado, prohibió las persecuciones contra ellos. Sin embargo, San Simeón fue denunciado por su proselitismo, sometido a torturas durante varios días hasta que fue asesinado en la cruz, como Jesús.

Nacida muy pobre, a la edad de 12 años Zita debe ir a trabajar para la noble familia Fatinelli en Lucca. Aquí sufre el acoso de otros sirvientes, pero siempre tiene una sonrisa y está lista para la caridad con los pobres. La familia reconoció sus dones y le confió la casa hasta su muerte en 1278.  

Calendario Litúrgico

27 de abril: II Domingo de Pascua

Solemnity

Lecturas y Evangelio de hoy

Primera Lectura: Hechos 5, 12-16
Salmo Responsorial : Salmo 117, 2-4. 22-24. 25-27a
Segunda Lectura: Apocalipsis 1, 9-11a. 12-13. 17-19
Aclamación antes del Evangelio: Juan 20, 29
Evangelio: Juan 20, 19-31

Color litúrgico: Blanco

Reflexión

  • Y a ti, oh Señor, que ves nítidamente con tus ojos los abismos de la conciencia humana, ¿qué podría pasarte desapercibido de mí, aun cuando yo me negara a confesártelo? (San Agustín)

  • Muchas veces pensamos que ir a confesarnos es como ir a la tintorería. Pero Jesús en el confesionario no es una tintorería. La confesión es un encuentro con Jesús que nos espera tal como somos (Francisco)

  • Cristo actúa en cada uno de los sacramentos. Se dirige personalmente a cada uno de los pecadores: ‘Hijo, tus pecados están perdonados’ (Mc 2,5); es el médico que se inclina sobre cada uno de los enfermos que tienen necesidad de Él para curarlos; los restaura y los devuelve a la comunión fraterna. Por tanto, la confesión personal es la forma más significativa de la reconciliación con Dios y con la Iglesia (Catecismo de la Iglesia Católica, nº 1.484)

    📖 Evangelio de hoy
    🙏 Laudes
    📅 Calendario Litúrgico